Tuesday, November 27, 2012

POR LA DIGNIDAD DE LAS NIÑAS DEL MUNDO












Están en la memoria de todos los casos emblemáticos de las menores Rhimsa o Malala. Estas adolescentes se han convertido en símbolos de una lucha contra costumbres ancestrales o prejuicios que seguro que no estaban en la mente de ningún fundador de una gran religión.

Dentro de las iniciativas del Día Mundial por los Derechos de la Infancia y de la Adolescencia, el pasado 20 de noviembre, en recuerdo de la aprobación de la primera carta de derechos de la infancia, en la asamblea general de Naciones Unidas, algunas tratan de devolver su dignidad como hijas de Dios a mujeres que desde la infancia son demonizadas o estigmatizadas.

La más infamante marca que reciben es la de "brujas". Es el modo de solucionar los problemas de las familias en la cultura tradicional ancestral no cristianizada de algunas zonas. Si algo pasa es porque los malos espíritus han entrado en el hogar, y la manera de solucionarlo es expulsar al presunto "brujo", casi siempre un niño o niña.

El Movimiento de Lucha contra el Hambre en el Mundo (MLFM) invita a defender los derechos violados de los niños y de los adolescentes, y en particular llama la atención sobre el fenómeno de las niñas violadas físicamente y psicológicamente, en Italia y en el sur del mundo, informa la agencia vaticana Fides.

Las niñas son doblemente expuestas. En Italia, por ejemplo, se ha pasado de 4.319 víctimas de violencia en 2010 a 4.946 en 2011, de las cuales el 61% son niñas.

En el mundo, alrededor de 130 a 140 millones de niñas habrían sufrido mutilaciones genitales. Además, tres millones de niñas corren peligro cada año de estar sometidas a esta práctica en 28 países de África y del Medio Oriente.

A esto, hay que añadir en torno a un total de entre 300.000 y 1,2 millones de menores objeto de tráfico cada año. Las niñas y adolescentes son más de la mitad, mientras que unos 250.000 niños son empleados como soldados, reclutados tanto por ejércitos de 85 países. Unas cien mil niñas son forzadas a sufrir violencias sexuales terribles.

Se estima entre 500 millones y 1,5 millardos el número de menores que están sometidos a diferentes formas de violencia y de maltratos.

Por otro lado, si los chicos y jóvenes están más expuestos a violencias físicas, las niñas y adolescentes sufren en su mayoría violencias sexuales, sobre todo en su domicilio por parte de parientes o de conocidos.

El MLFM denuncia los abusos continuos y las violencias a las que son sometidas las niñas congoleñas, víctimas de una guerra que no tiene fin, en la cual todos los pretextos son buenos para someterlas a torturas de todo género. Hasta llegar a acusarlas de ser "brujas", lo que las obliga a una vida de privaciones, mucho más expuestas que los niños, al margen de la sociedad, entre los mercados de Bukavu y de Goma, en el sur y en el norte Kivu.

El MLFM trabaja con ellas desde hace quince años a través de proyectos concretos de ayuda humanitaria, combatiendo la mortalidad infantil, con programas de asistencia sociosanitaria, pero sobre todo acogiendo a los niños abandonados por sus familias --con el estigma de ser "brujos" o por miseria- en dos estructuras de acogida en Ruanda y en la República democrática del Congo.

Cientos de niñas Mai Mihogo (portadoras de agua) cada día procuran sobrevivir en los mercados alrededor de Bukavu, con el consiguiente riesgo de algo peor, vendiendo vasos de agua a los transeúntes de las cuales se encarga la hermana Natalina, con la ayuda del MLFM.

ROMA, domingo 25 noviembre 2012
Fuente: ZENIT. org

''DEBEMOS RECUPERAR, RESCATAR LA FIGURA DE SAN JOSÉ'', por Fray Enrique Llamas, OCD, presidente de la Sociedad Mariológica española.


















"Debemos recuperar, rescatar la figura de san José". Estas palabras resumen la ponencia del carmelita descalzo español fray Enrique Llamas, uno de los principales exponentes de la teología josefina de nuestros días, y presidente de la Sociedad Mariológica española.

Al comenzar el pasado viernes el segundo día del III Simposio Internacional sobre san José, que la Congregación de los Oblatos de San José organizó, en colaboración con el Arzobispado de Lima, la expectativa era grande en el auditorio del colegio "De Jesús". Los novecientos asientos del auditorio se llenaron antes de dar inicio a las oraciones y rezo de las Vísperas.

El primer ponente fue el carmelita descalzo español y catedrático emérito de la Universidad de Salamanca, fray Enrique Llamas, autor de numerosos libros sobre mariología y buen conocedor de la teología de san José, de quien, siguiendo el ejemplo de santa Teresa de Jesús, es devoto de alma y corazón.

Con palabra fluyente y atrayendo la atención del público hacia su exposición fue mostrando cómo san José, esposo de María y padre virginal de Jesús, está directamente relacionado con el misterio de la Encarnación. El beato Juan Pablo II, en la Redemptoris Custos, confirma que la predestinación de la Virgen incluye la de san José. "En la predestinación de María Santísima por el Padre Eterno, vemos también la predestinación de san José, destinado desde toda la eternidad a ser el esposo de María". "La vida y existencia de san José están en función del misterio de la Encarnación del Hijo de Dios".

A partir de este punto debe darse inicio a la teología josefina. Las afirmaciones del ponente eran acogidas con entusiasmo por el público asistente. "La vida y existencia de san José están en función del misterio de la Encarnación del Hijo de Dios. San José goza de las prerrogativas del misterio divino. San José y María Santísima tienen una misma predestinación y una misma misión".

"San José cooperó eficientemente en la Redención". Y para la propia Iglesia: existe una "profunda relación entre san José y la Iglesia, en vista de la paternidad y la Encarnación". Después de la Santísima Virgen san José es el modelo más auténtico para nosotros. Por eso el padre Llamas hizo un llamado para que la figura de san José sea rescatada de la frialdad que a su respecto existe hoy.

La intervención del religioso español fue muy aplaudida. El interés que suscitó se pudo comprobar en las numerosas preguntas que le fueron hechas al terminar su exposición, todas respondidas dando muestras de ese amor y conocimiento que tiene sobre el santo patriarca y patrono del Perú.

La segunda ponencia del día estuvo a cargo del padre Antonio Bertolim OSJ, provincial de Brasil de la Orden de Oblatos de San José. El tema de la exposición fue "San José y la Nueva Evangelización".

A través de citas de papas, desde el beato Pío IX, y de santos contemporáneos, se fue extendiendo con mucha erudición sobre los aspectos pastorales de la devoción y del papel de san José en la actualidad.

Con una fuerte salva de aplausos y el rezo de la Oración a San José se dio por encerrado este segundo día de estudios sobre "San José, hombre de Fe".

LIMA, domingo 25 noviembre 2012
Fuente: ZENIT.org

Sunday, November 4, 2012

Benedicto XVI: "Se debe amar a todos, incluso a quien no se lo merece"


Reflexión del santo padre durante el rezo del Ángelus, Vaticano, 4 noviembre 2012.

¡Queridos hermanos y hermanas!

El evangelio de este domingo (XXI del año C; Mc. 12,28-34) nos propone la enseñanza de Jesús sobre el mandamiento más importante: el mandamiento del amor, que es doble: amar a Dios y amar al prójimo.

Los santos, que acabamos de celebrar juntos en una única fiesta solemne, son aquellos que, confiando en la gracia de Dios, tratan de vivir de acuerdo a esta ley fundamental. De hecho, el mandamiento del amor lo puede aplicar plenamente quien vive en una relación profunda con Dios, así como el niño se hace capaz de amar a partir de una buena relación con su madre y su padre.

San Juan de Ávila, a quien recientemente he proclamado Doctor de la Iglesia, escribe así al inicio de su Tratado del Amor de Dios:

"La razón, dice, que empuja mayormente nuestro corazón al amor de Dios, es el considerar profundamente el amor que Él tuvo por nosotros... Esto, además de los beneficios, mueve el corazón a amar; porque el que hace al otro un beneficio, le da algo que tiene; pero el que ama, se entrega a sí mismo con todo lo que tiene, sin que le quede algo más para dar". 

Antes de ser un mandato -el amor no es un mandato-, es un regalo, una realidad que Dios nos hace conocer y experimentar, de modo que, como una semilla pueda también germinar dentro de nosotros, y desarrollarse en nuestra vida.

Si el amor de Dios ha echado raíces profundas en una persona, esta es capaz de amar incluso a quien no lo merece, así como Dios hace con nosotros. El padre y la madre no quieren a sus hijos solo cuando se lo merecen: lo aman siempre, aunque es natural que le hacen entender cuando se equivocan.

De Dios, aprendemos a querer siempre y solamente el bien y nunca mal. Aprendemos a mirar al otro no solo con nuestros ojos, sino con la mirada de Dios, que es la mirada de Jesucristo. Una mirada que sale del corazón y no se detiene en lo superficial, va más allá de las apariencias y captura los más profundos anhelos del otro: de ser escuchado, de una atención gratuita; en una palabra: de amor.

Pero también se produce en la dirección opuesta: que abriéndome al otro tal como es, yendo hacia él, haciéndome disponible, me abro también para conocer a Dios, para sentir que está allí y que es bueno. Amor a Dios y amor al prójimo son inseparables y están en relación recíproca.
Jesús no inventó ni lo uno ni lo otro, pero reveló que son, después de todo, un solo mandamiento, y lo hizo no solo con la palabra, sino sobre todo con su testimonio: la persona misma de Jesús y todo su misterio encarnan la unidad del amor de Dios y del prójimo, como los dos brazos de la Cruz, vertical y horizontal.

En la Eucaristía, Él nos da este doble amor, dándose a Sí mismo, porque, alimentados de este Pan, nos amamos los unos a otros como Él nos ha amado.

Queridos amigos, por intercesión de la Virgen María, oramos a fin de que todo cristiano sepa mostrar su fe en el Dios único y verdadero con un claro testimonio de amor al prójimo.

Saturday, November 3, 2012

When a child dies

Our Mission

The mission of The Compassionate Friends is to assist families toward the positive resolution of grief following the death of a child of any age and to provide information to help others be supportive.

The Compassionate Friends was founded over 40 years ago when a chaplain at the Warwickshire Hospital in England brought together two sets of grieving parents and realized that the support they gave each other was better than anything he, as a chaplain, could ever say or provide.

Meeting around a kitchen table, the Lawleys and the Hendersons were joined by a bereaved mother and the chaplain, Simon Stephens, and The Society of the Compassionate Friends was born. The Compassionate Friends jumped across the ocean and was established in the United States and incorporated in 1978 in Illinois.

Each chapter, along with the supporting National Office, is committed to helping every bereaved parent, sibling, or grandparent who may walk through our doors or contact us.

Today more than 630 chapters serving all 50 states plus Washington D.C. and Puerto Rico offer friendship, understanding, and hope to bereaved parents, siblings, grandparents, and other family members during the natural grieving process after a child has died. Around the world more than 30 countries have a Compassionate Friends presence, encircling the globe with support so desperately needed when the worst has happened.

www.compassionatefriends.org