Llega la Semana Santa y con ella un populoso grupo de misioneros venidos de Madrid que acuden a Asturias para ayudar a los párrocos que prestan servicio en los concejos de Piloña, Amieva y Ponga. No es la primera vez que lo hace. De hecho en este 2015 se cumple el décimo aniversario de esta iniciativa denominada ´Familia Misionera´ en Asturias.
Su objetivo es ayudar a los párrocos de estos concejos que tienen muchos pueblos a su cargo. En esta ocasión serán 67 las personas que participen de esta singular iniciativa que ellos mismos denominan «misiones rurales».
«Nosotros lo que hacemos es ponernos a disposición del párroco. Normalmente suele ser un mismo sacerdote el que atiende a varios pueblos que están dispersos entre sí y nuestra manera de ayudar es ir casa por casa visitando a la gente de esos pueblos, a los que trasladamos el mensaje del párroco», explica Carlos del Castillo, un veterano de estas peculiares misiones rurales que se desarrollan anualmente durante la Semana Santa en el Oriente asturiano.
En la jornada del miércoles irán llegando 67 los misioneros que acuden a colaborar a la comarca este año. En concreto ´echarán una mano´ en los pueblos de Piloña, Ponga y Amieva, aunque fijarán su base en Cangas de Onís. Allí el grupo se alojará en las instalaciones del Colegio Reconquista y también en una de las casas del Santuario de Covadonga.
La iniciativa ´Familia Misionera´ está impulsada por ´Regnum Christi´ (Legionarios de Cristo) y precisamente son familias las que acuden a desarrollar la labor de colaborar con los párrocos de los concejos citados.
En total este grupo de 67 personas estará compuesto por 14 familias. Habrá 30 personas adultas, 32 niños y dos bebés, a los que acompañarán 3 sacerdotes legionarios de Cristo y 2 consagradas.
Carlos del Castillo lleva ya 14 años participando en este tipo de misiones que se realizan por diferentes puntos de España. En esencia lo que buscan estas personas con esta iniciativa religiosa es compartir su fe con los lugareños en un momento tan especial para los cristianos como es la Semana Santa.
«El visitar a las gentes de los pueblos en sus casas nos sirve también para detectar las necesidades de estas personas y se las hacemos llegar al párroco», indica del Castillo.
Su labor es especialmente importante en el caso de los mayores. «Hay ocasiones en las que nuestra tarea se centra en hacer compañía a personas mayores que viven solos y tienen poca movilidad», señala.
Este veterano misionero recalca que «nosotros somos seglares» por lo que no imparten sacramentos como el de la confesión o la comunión. Esa es tarea de los sacerdotes. Pero lo que sí que pueden hacer es recoger las peticiones de los vecinos de los pueblos que tengan interés en recibir esos sacramentos y que, por sus problemas de movilidad, no puedan acudir a las iglesias principales de la parroquia a recibirlos. Ellos se las trasladan al párroco para que éste visite a los vecinos que reclaman su atención.
Lo que sí tratan estos misioneros en los pueblos a los que acuden es que «se celebre un Vía Crucis y que los vecinos participen en las celebraciones litúrgicas».
Éstas no se ofician en todas las localidades y parte de su tarea es también indicar a los vecinos aquellos pueblos donde sí tienen lugar. Incluso en caso de que sea necesario, y los vecinos así lo quieran, se encargan de llevarles en sus propios coches a aquellas localidades en las que sí hay celebraciones de la Semana Santa para que puedan asistir a ellas. Luego les llevan de vuelta a sus domicilios.
«También tratamos que el Sábado Santo se haga en cada pueblo que visitamos una celebración para recordar la Resurrección de Jesús», añade.
En esencia la labor de estos misioneros en la comarca oriental la resume Carlos del Castillo. «Aportamos más brazos y más gargantas con el objetivo de que los párrocos que atienden estos concejos puedan llegar a más sitios durante unas fechas tan especiales como son las de la Semana Santa».
El párroco Rubén Pulido, que desde hace dos años es responsable de 15 parroquias repartidas por los concejos de Piloña y Cabrales, pero que antes prestó su servicio en Onís, Ponga y Amieva, señala que la ayuda de estos misioneros «se necesita bastante».
«Hacen una labor muy bonita. Van por las casas, organizan rosarios, Vía Crucis... La gente de los pueblos donde ya han estado los quiere mucho porque son personas muy educadas y siempre dispuestas a ayudar», destaca.
Otro de los objetivos de estas personas es trasladar su fe a las gentes de los lugares a los que acuden a colaborar. Parte de ellos son padres de familia del madrileño colegio Highlands School Los Fresnos y estas fechas en Asturias les sirven a ellos también para vivir en un ambiente de oración junto a sus familias, servir a la Iglesia a través de los párrocos y dar testimonio de su fe.
En total serán cerca de 800 las personas que esta Semana Santa se repartan por las diferentes misiones rurales que ´Regnum Christi´ va a desarrollar en diferentes puntos de España. Además de a Asturias estarán presentes en Ávila, Albacete, Cáceres, Córdoba, Castellón, Palencia, Teruel, Huesca o Murcia.
Fuente: religionenlibertad.com
por Terry Basterra/ElComercio.es
Su objetivo es ayudar a los párrocos de estos concejos que tienen muchos pueblos a su cargo. En esta ocasión serán 67 las personas que participen de esta singular iniciativa que ellos mismos denominan «misiones rurales».
«Nosotros lo que hacemos es ponernos a disposición del párroco. Normalmente suele ser un mismo sacerdote el que atiende a varios pueblos que están dispersos entre sí y nuestra manera de ayudar es ir casa por casa visitando a la gente de esos pueblos, a los que trasladamos el mensaje del párroco», explica Carlos del Castillo, un veterano de estas peculiares misiones rurales que se desarrollan anualmente durante la Semana Santa en el Oriente asturiano.
En la jornada del miércoles irán llegando 67 los misioneros que acuden a colaborar a la comarca este año. En concreto ´echarán una mano´ en los pueblos de Piloña, Ponga y Amieva, aunque fijarán su base en Cangas de Onís. Allí el grupo se alojará en las instalaciones del Colegio Reconquista y también en una de las casas del Santuario de Covadonga.
La iniciativa ´Familia Misionera´ está impulsada por ´Regnum Christi´ (Legionarios de Cristo) y precisamente son familias las que acuden a desarrollar la labor de colaborar con los párrocos de los concejos citados.
En total este grupo de 67 personas estará compuesto por 14 familias. Habrá 30 personas adultas, 32 niños y dos bebés, a los que acompañarán 3 sacerdotes legionarios de Cristo y 2 consagradas.
Carlos del Castillo lleva ya 14 años participando en este tipo de misiones que se realizan por diferentes puntos de España. En esencia lo que buscan estas personas con esta iniciativa religiosa es compartir su fe con los lugareños en un momento tan especial para los cristianos como es la Semana Santa.
«El visitar a las gentes de los pueblos en sus casas nos sirve también para detectar las necesidades de estas personas y se las hacemos llegar al párroco», indica del Castillo.
Su labor es especialmente importante en el caso de los mayores. «Hay ocasiones en las que nuestra tarea se centra en hacer compañía a personas mayores que viven solos y tienen poca movilidad», señala.
Este veterano misionero recalca que «nosotros somos seglares» por lo que no imparten sacramentos como el de la confesión o la comunión. Esa es tarea de los sacerdotes. Pero lo que sí que pueden hacer es recoger las peticiones de los vecinos de los pueblos que tengan interés en recibir esos sacramentos y que, por sus problemas de movilidad, no puedan acudir a las iglesias principales de la parroquia a recibirlos. Ellos se las trasladan al párroco para que éste visite a los vecinos que reclaman su atención.
Lo que sí tratan estos misioneros en los pueblos a los que acuden es que «se celebre un Vía Crucis y que los vecinos participen en las celebraciones litúrgicas».
Éstas no se ofician en todas las localidades y parte de su tarea es también indicar a los vecinos aquellos pueblos donde sí tienen lugar. Incluso en caso de que sea necesario, y los vecinos así lo quieran, se encargan de llevarles en sus propios coches a aquellas localidades en las que sí hay celebraciones de la Semana Santa para que puedan asistir a ellas. Luego les llevan de vuelta a sus domicilios.
«También tratamos que el Sábado Santo se haga en cada pueblo que visitamos una celebración para recordar la Resurrección de Jesús», añade.
En esencia la labor de estos misioneros en la comarca oriental la resume Carlos del Castillo. «Aportamos más brazos y más gargantas con el objetivo de que los párrocos que atienden estos concejos puedan llegar a más sitios durante unas fechas tan especiales como son las de la Semana Santa».
El párroco Rubén Pulido, que desde hace dos años es responsable de 15 parroquias repartidas por los concejos de Piloña y Cabrales, pero que antes prestó su servicio en Onís, Ponga y Amieva, señala que la ayuda de estos misioneros «se necesita bastante».
«Hacen una labor muy bonita. Van por las casas, organizan rosarios, Vía Crucis... La gente de los pueblos donde ya han estado los quiere mucho porque son personas muy educadas y siempre dispuestas a ayudar», destaca.
Otro de los objetivos de estas personas es trasladar su fe a las gentes de los lugares a los que acuden a colaborar. Parte de ellos son padres de familia del madrileño colegio Highlands School Los Fresnos y estas fechas en Asturias les sirven a ellos también para vivir en un ambiente de oración junto a sus familias, servir a la Iglesia a través de los párrocos y dar testimonio de su fe.
En total serán cerca de 800 las personas que esta Semana Santa se repartan por las diferentes misiones rurales que ´Regnum Christi´ va a desarrollar en diferentes puntos de España. Además de a Asturias estarán presentes en Ávila, Albacete, Cáceres, Córdoba, Castellón, Palencia, Teruel, Huesca o Murcia.
Fuente: religionenlibertad.com
por Terry Basterra/ElComercio.es